Kindan No Koi - IV - La primera. La vencida.

Estábamos jugando en la consola cuando en el móvil  de Bryan llego un mensaje, escasamente pude leer una línea "tienes que llegar antes de las 9" cerro el móvil y se levantó.

-Bueno chicos ya está anocheciendo y tengo que irme-Dijo levantándose.

-No te vayas dile a tu mama que te quedas aquí una noche.

-Ah... Es que... Mi mama.... No le gusta que me quede fuera de casa-dijo dudoso.

-Huh vale... Iras mañana a la escuela?

-Claro es mi primer día no puedo faltar

-Nos vemos mañana!

Abrió la puerta y salió, Oscar y yo nos quedamos solos, el empezó a acariciar mi entre pierna hasta llegar a un bulto que se hacía en mi bóxer.

-No espera a que mi papa se duerma.

-No quiero esperar, quiero sentirte ahora mismo.

-Dale, espera un rato y podremos hacer y deshacer la tierra si quieres.

-Suena hermoso cuando lo dices así. Está bien esperare pero no más de 30 minutos!

-Gracias-Le dije acariciando su cabeza, 

-A propósito que fuiste a hacer con tu papa cuando llego?

-Le dije...

-Qué?

-Bueno le pregunte si nos iríamos o que pasaría...

-Y que dijo? 

-Nos iremos a la casa se mi tío en vacaciones mientras encontramos una casa aquí.

-Qué? Pero las vacaciones son de tres meses…

-Ven con nosotros!

-Espera... Qué?

-Mi tío tiene mucho espacio no vive con nadie y es solo en vacaciones

-Esto es... Inesperado creo...

-Dale, vamos, nos divertiremos! Es una casa gigantesca con piscina y una cancha de básquet y está a 30 minutos de la playa... -le dije entusiasmado-...Sabes... Siempre he querido hacerlo contigo en una playa-le dije al oído

-Vale solo porque siempre has querido. -dijo riéndose.

Ya eran casi las diez de la noche y Oscar recibió un mensaje de su mama " dónde estás? estoy preocupada, no llegaste a almorzar y tampoco a cenar, esas bien?" Oscar se levantó de la silla y me pidió el teléfono el cual le entrege en las manos, tras varios minutos de charla colgó el teléfono y parecía estar muy contento.

-Me encanta tu sonrisa-le dije mirándolo a la boca.

-Puedo ir!

-Seguro?  Te dejo?

-Sí, mientras sea en vacaciones está bien además porque al parecer tiene que hacer un viaje a una comunidad a dos horas de aquí a ayudar a los doctores con una campaña de cosas de doctores y otras cosas

-Perfecto, ahora, en que estábamos hace unos minutos?

-No sé... En qué estábamos?

-Mi papa ya se fue a dormir...

-Ah Si si si si en eso... Ahora si?

-Claro que si.

El  me empezó a besar y poco a poco empezó a sentarse sobre mis piernas... A lo cual obviamente por una herida suturada un día antes tuve que quejarme.

-Huh, espera... Duele... Ouch quítate de encima

-Lo lamento te lastime?

-No solo... Espera un segundo

-Creo que hoy no debemos hacer nada, no quiero lastimarte.

-No... Yo quiero, solo déjame estar arriba, vale?

-Claro-Dijo mientras me alzaba para sentarme en sus piernas, besándome y tomándome entre sus brazos, empezó a jugar con mi cabello, y paso quitar mi camisa, cada vez me besaba más apasionadamente, rápido, fuerte, hace casi dos días que no nos tocábamos y por eso estaba totalmente excitado y lo entendía, aunque yo fuera el de los impulsos sexuales leves, empezó a intentar quitarme los bóxer en los cuales había estado todo el día y al darse cuenta me haría daño si me los quitaba de la forma normal solo se le ocurrió una cosa... rómpelos, tomo la parte de atrás y con una fuerza brutal los rompió a la mitad de lado a lado quedándose con una parte de ellos en cada mano, mi pene había crecido al 100% y el de él no se quedaba atrás un bulto enorme en su pantalón enmarcaba su pene retorciéndose dentro,  jugaba con mi culo como si fuera de él y bueno en parte lo era y me gusta a como lo hacía, y de repente se sacó el pene del pantalón, yo estaba dispuesto a masturbarlo pero él quería algo más, paso sus dedos por mi boca y bajo por mis costillas hasta mi culo y empezó a meter un dedo, lo abrace fuerte, no era dolor, era un fastidio intenso dentro de mí que pronto desapareció dándole lugar a un algo que no diría placentero pero tampoco me disgustaba, al darse cuenta que ya me había acostumbrado metió otro dedo el cual si dolió pero me contuve para no gritar, porque sabía que a él le gustaba pero no sabía que me estaba preparando para algo mucho mayor, cuando el dolor desapareció se transformó en placer, ya quería llegar al tercer dedo porque sabía que si el segundo era así el tercero sería mejor sin embargo hizo lo mismo con la otra mano, la llevo a mi boca y luego a mi culo, y ensarto otros dos dedos intentando abrir mi ano todo lo posible, aunque no era mucho debido a que era la primera vez que me hacían eso, el dolor que sentía me hacía soltar lágrimas de mis ojos que bajaban por mi mejilla y caían en los hombros de Oscar.

-Te duele?

-No. –Menti.- Sigue.

El continuo y empezó a meter y a sacar lentamente sus dedos de mi ano lo cual me causaba un placer inmenso, movía mi cintura como diciéndole que lo hiciera más rápido y profundo y así lo hizo, rápido y profundo hasta el punto en el que me corrí en su vientre, mientras me corría me despegue de su pecho y algo de mi semen logro caer en su cuello y su rostro, en cual lamí con lentitud y limpie hasta donde pude. - Ahora es mi turno-Dijo poniendo la cabeza de su pene en la entrada de mi ano donde dos de sus dedos continuaban Descansando sentía como su pene soltaba gotas de precum en la aureola de mi ano sin embargo no lo metía, me miraba a los ojos como un bebe pidiendo permiso para comer una galleta, a lo cual asentí  y dando paso a un beso largo e interminable justo antes de hacerme suyo...

-Chicos dejen de hacer tanto ruido que intento dorm... -Mi padre detrás de nosotros viendo esa escenita se dio la vuelta -Perdón... Continúen-Dijo desapareciendo en los corredores de la casa.

-Que fue eso?-pregunto Oscar

-Qué?... Oh te refieres a porque no nos sacó de la casa?

-Sí.. Esperaba que me matara

-Le dije...-dije dándole un beso en la mejilla

-El que?

-Que te amo, que quiero estar contigo, por eso me dejo llevarte con mi tío

-Entonces no me preocupo?

-Solo haz lo que dijo... Continua...-Dije abrazándolo fuerte, esperando un dolor intenso que minutos después se transformaría en placer. Pero debido al susto la erección de mi bebe había bajado, a lo cual empecé a masturbar para intentar regresar a lo que estábamos pero el soltó los dedos de mi ano que ahora que lo menciono siempre estuvieron ahí desde que mi papa entro hasta ahora, mi ano se contrajo rápidamente, el me quito de encima suyo y se recostó en el sofá-Chupa bebe...Chupa-dijo poniendo su brazo detrás de su cabeza para deleitarse viendo como yo le mamaba su verga, jugosa, tierna, empecé a chupar  y a chupar con fuerza a tal punto que me daba arcadas, él estaba gimiendo con fuerza y para callarlo empecé a pasar mis manos sobre sus pezones intentándole decir que me llevara a mi habitación, me levanto y me cargo hasta mi habitación  donde me dejo sobre la cama y empezó a masturbarse con fuerza.

-No espera, que haces?

-Ya no aguanto... Tengo que correrme-Dijo gimiendo lo que avisaba que su eyaculación era inminente

-No, yo quiero hacerlo espera!-dije rápidamente mientras me metía su pene en mi boca y en ese mismo instante varios disparos de semen inundaban mi boca, hasta que no pude contener la cantidad de semen en mi boca y la saque apuntando a mi pecho donde cuatro disparos más, bañaron mi abdomen y mi pecho, me acostó en la cama y me pidió que no tragara el semen que tenía en mi boca, empezó a limpiar con su lengua el semen que había en mi pecho y abdomen hasta dejarme limpio, y paso a darme un beso en el que intentaba succionar el semen que tenía en mi boca, casi era imposible succionarlo así que le di la vuelta haciéndome encima suyo dejando caer su semen desde mi boca a la suya, el me volvió a acostar en la cama y dejo caer su semen en mi pecho y abdomen y luego se acostó sobre mi haciendo una especie de sándwich de lefa y saliva de los dos, nos giramos para que yo quedara arriba y no me lastimase la pierna y así dormimos, a pesar de estar en la posición mas incomoda de la tierra dormí como un bebe y estoy seguro que el también.

A la mañana siguiente me levante porque el móvil estaba sonando muy irritantemente y lo último que quería era que mi chico se despertara, alargue la mano hasta donde se encontraba el móvil, lo tome y conteste.

-No estoy!

-Menos mal porque ya empezaron clases!-Dijo Bryan al otro lado de la línea. 

-Carajo lo olvide, ya vamos para allá- dije cerrando mi móvil y  levantándome con cuidado del pecho de Oscar. -Amor... Amor despierta-dije sacudiéndolo tiernamente.

-Que linda manera de despertarse.

-Gracias-dije sonrojado-bebe tenemos que irnos ya vamos tarde.

-Oh... Ok vamos... Tu papa sigue aquí?

-Picaron, porque lo preguntas?

-Porque si él no está tendré que ser yo quien Te ayude a bañarte.

-Pero yo puedo hacerlo sol...Oh! vale porque no quiero caerme en la ducha...-dije rodeando el cuello de Oscar con mis brazos.

-Vale vamos entonces.

Entramos en la ducha y tan pronto entramos cerró la puerta de cristal y me beso suave y lentamente, esperaba que empezaran sus juegos sexuales que tanto placer me daban pero me dio la vuelta y empezó a enjabonarme todo el cuerpo pasaba por mis brazos, mis axilas, mi pecho, abdomen, pene, piernas, y cuidadosamente me lavo alrededor de la herida, y luego me quito todo el jabón con el agua yo obviamente hice lo mismo pero no pude bañarlo completamente puesto que la herida no me deja a arrodillarme, pasamos unos cinco minutos bañándonos y otros cinco besándonos, me sorprendió que no quisiera hacer nada sexual conmigo porque él era el de los instintos sexuales salvajes. Salimos de la ducha y no me permitió ponerme prenda alguna, toda la ropa me la puso el cuidadosamente, mientras besaba por donde pasaba-No quiero que te esfuerces-Dijo al terminar de vestirme, me tomo en sus brazos y salimos lentamente a la escuela, al llegar era casi hora del descanso, me senté con él y ambos estudiamos hasta que sonó  la campana para el descanso salimos y estuvimos hablando de todo un poco y entre esa conversación salió el tema del viaje y del divorcio de mis padres.

-Sé que no debería preguntar esto pero... Ya le preguntaste a tu papa con quien le fue infiel a tu mama?

-No de hecho estaba pensando lo mismo, pero quiero que sea el quien me diga, no seré yo el que le pregunte.

-Vale, y el viaje a casa de tu tío? cuándo será?

-Bueno mi papa me dijo que el ultimo día de clase pasamos por la casa hacíamos las maletas y salíamos el mismo día, mi mama se quedara en la casa con mis hermanos... Te prometo que nos vamos a divertir- le dije poniendo mi mano en su pierna.

-Sabes que mi familia no sabe nada de nosotros, y menos acá en la escuela-dijo mientras quitaba mi mano de su pierna.

-Vale no te enojes, perdóname

-No te preocupes, pero ya sabes.

-Puedo hacerte una pregunta?

-Dale...

-Hoy en la ducha... Porque no quisiste que hiciéramos nada? No tenías ganas?- dije sonriéndole

-Te amo... No quiero que pienses que solo eres un juguete para mí, eres importante y no quiero que cada vez que me quede contigo sea sexo y ya...

-Te besaría pero no creo que debamos... Me aguantare a que salgamos...-Dije haciendo pucheros, se me acerco y me beso suavemente y rápido fue casi un segundo que me pareció eterno.

-Gracias. -Dije sonrojado, y él me guiño el ojo y de pronto alguien detrás de nosotros toco nuestros hombros, lo último que quería era que fuera un maestro porque le diría a la madre de Oscar.

-Sabía que eran novios!-Dijo Bryan-Que Bonito!-Dijo haciendo voz de bebe.

-Lo lamento no sabía que estabas aquí.-Dijo Oscar

-Nah no hay problema ni que fuera homofobo.

-Como lo sabias?-Pregunte

-Por la manera en la que me pediste que no dejara que le penetraran ayer.

-Aww que bonito... No querías que me penetraran ayer?- dijo Oscar con tono de burla.

-Pues fíjate que no... Quiero ser yo quien lo haga primero!

-Hey sigo aquí!... Que no sea homofobo no significa que puedan hablar de sus fornicaciones conmigo -dijo jugando y después nos reímos todos.

Sonó la campana y regresamos a estudiar durante otras 4 horas eternas en las que por tener a mi bebe al lado siempre me daban ganas de besarlo. Termino la escuela y en el camino hablamos de cosas como aficiones y de más y resulta que los tres cumplimos años la misma semana,  y todos la misma edad, Bryan el mayor, Oscar el del medio y yo al último por 5 y 2 días respectivamente, estábamos pasando por una calle y Bryan se despidió de nosotros, queríamos saber dónde vivía exactamente así que lo perseguimos, mi pierna ya había mejorado a pesar de haber sido casi Un día atrás el accidente y podía moverme más sin ayuda. Seguimos a Bryan por unas cuatro calles sin que él se diera cuenta y entro a un edificio al cual no esperábamos verlo entrar...